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En 2005, la ciudad heroica de Colombia, Cartagena, vio nacer a un campeón, que cada día se ha superado a sí mismo y hoy, es uno de los referentes del surf adatado en América. Con catorce años está en la élite del deporte paralímpico.
A Freddy Marimón no solo lo caracteriza una gran destreza en el agua, en tierra es igual de hábil, pero con una patineta que lo lleva a todos lados, se impulsa con su mano y anda a toda velocidad, de hecho, gracias a esto fue que descubrió sus aptitudes para el surf, “yo me probé en natación, competí en Pereira y me traje dos medallas de oro, gracias a eso conocí al actual director del Instituto de Deporte de Cartagena, quien me obsequió un balón y una patineta, subí la foto y mi entrenador actual me dijo que patinar y nadar eran dos elementos muy importantes para el surf, aquí comenzó todo”, mencionó el surfista al recordar sus inicios.
Precisamente, el cartagenero es sinónimo de triunfo en cada lugar al que va, con cuatro años de trayectoria ya ostenta títulos, marcas y récords, como el bicampeonato del Abierto de Surf en Estados Unidos, torneo que ganó en 2018 y lo revalidó en 2019 con otro oro.
Al verlo competir, se ve su pasión, entrega y motivación, y es que tiene una gran razón por la cual dar el máximo en la competencia, su madre, su motor y apoyo, la causante del brillo en sus ojos, “mi mamá lo es todo para mí, pienso en ella cada vez que voy a competir y eso me motiva a ganar, ella me dice que siempre le ore a Dios, que él está conmigo y que siempre confíe en mí para traer un título”.
Sus dos hermanos y sus entrenadores también hacen parte de esta motivación, de hecho, su hermana mayor y su hermano menor siguieron su ejemplo y ahora son deportistas, “mi hermano menor compite en surf convencional y ha ganado varias medallas, mi hermana patina, pero no le gusta competir, ellos están orgullosos de mí”, menciona Freddy con madurez.
Esto último es lo que demuestra el surfista al hablar y al expresarse, madurez. Lo revalida con la manera en la que ve la competencia, “yo no soy de pensar en los rivales, ni en mirar lo que los otros están haciendo, yo soy más bien tranquilo, me gusta estar parchado con la gente, hablando y así compito, sintiendo paz y tranquilidad en el agua, esa es mi formula para ganar”.
El nombre de Freddy retumba en las calles de Cartagena y la gente se lo reconoce con cariño, fotos y saludos, “en mi ciudad siento mucho el apoyo de la gente, cuando me ven me piden fotos y autógrafos y ese cariño me gusta retribuirlo ganando y eso es un impulso más para seguir”.
Por último, el cartagenero envía un mensaje a todas esas personas que se dejan vencer por las dificultades, “no hay que dejarse ganar por los malos pensamientos, por el negativismo y por lo que dicen las demás personas, siempre hay que hacer lo que te dice tu corazón y así salir adelante”, finaliza con alegría Freddy, un imPARAble que deja en alto la bandera de Colombia en cada lugar al que va.
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