‘‘Era el primer evento deportivo internacional al que asistíamos y ver cómo Omar Marín ganó la medalla de plata, la primera en toda la historia de nuestra delegación de Boccia, sin duda, fue algo que nos marcó para siempre. Desde allí nos dimos cuenta que podíamos soñar con preseas paralímpicas, obviamente no iba a ser fácil, pero se podía’’, afirmó el entrenador Camilo Ortega, añadiendo que con ese hito histórico el deporte paralímpico, el Boccia se transformó para siempre e inició un camino de alto rendimiento.
Camilo Ernesto Ortega Arellano es entrenador de la Selección Colombia de Boccia. Nació el 5 de mayo de 1983 en Pasto, Nariño y a sus 38 años de edad ha tenido un recorrido admirable con el deporte paralímpico. Su familia está conformada por su esposa Marcela y sus hijos, de otro matrimonio, Daniel de 17 años y Catalina de 14.
Su primer título profesional lo obtuvo en el 2004, año en el que se graduó de Fisioterapia en la Escuela Nacional del Deporte. Así mismo, en 2007 culminó la especialización en Actividad Física Terapéutica en la misma institución educativa, y en 2010 se graduó de la maestría en Salud Infantil en la Universidad de Manizales.
Desde muy jóven comenzó a trabajar como voluntario. En 2003 llegó al deporte Paralímpico, momento en el que estaba en la universidad. Hizo parte de un encuentro colombovenezolano de parálisis cerebral que organizó la Universidad Santiago de Cali, en el cual se encargó de la organización logística en calidad de voluntario. Allí conoció al, en ese entonces presidente del Comité Paralímpico Colombiano, con quien tuvo conversaciones acerca de Boccia y comenzaron a trabajar.
Posteriormente, estuvo en un programa de práctica de fisioterapia en la misma universidad relacionado con infancia y adolescencia, cuyo objetivo era la rehabilitación y que más adelante se convertiría en un proceso deportivo y competitivo. Finalmente, en 2009 fue nombrado entrenador de la Selección Colombia de Boccia hasta la actualidad.
Del mismo modo, en paralelo al deporte paralímpico, fue docente de fisioterapia en el área de neurorehabilitación en la Universidad Santiago de Cali, del año 2007 hasta el año 2020.
Camilo Ortega resalta como uno de los mejores entrenadores del país debido a su gran trabajo y entrega al deporte de Boccia. Una vez vinculado al deporte paralímpico junto a su grupo de trabajo ganó la primera presea con el atleta José Omar Marín en la Copa América de 2009, obteniendo un segundo lugar que le dio la medalla de plata.
Así mismo, dentro de su amplio palmarés se encuentra la medalla de plata de Eliana Henao en los Juegos Parapanamericanos de Guadalajara 2011; la presea de bronce de Angie Aya, Ferney Rojas y Felipe Rodríguez en la categoría de equipos BC3, en la Copa América de Kansas 2013; las dos medallas de bronce en los Juegos Parapanamericanos Argentina 2013, de la mano de Andrés Díaz, en la categoría BC1, y de Miguel Góngora de BC2.
Del mismo modo, en los Parasuramericanos de Chile 2014 ganó medalla de oro con Carlos Gallego y Euclides Grisales en la categoría de parejas BC4, y presea de bronce con Jesús Romero y Ferney Rojas en parejas BC3. Más tarde, en la Copa Continental de Montreal 2015 conquistó la medalla de bronce con los atletas Jesús Romero y Felipe Rodríguez, nuevamente con la categoría parejas BC3.
Tiempo después, en los Juegos Parapanamericanos de Toronto 2015 obtuvo dos preseas de plata con Jesús Romero, Angie Aya y Felipe Rodríguez, en la categoría por equipos BC3, y con Euclides Grisales en individual BC3. En su retorno a los Juegos Parapanamericanos Juveniles, pero esta vez de Brasil 2017, superó la actuación del 2013, ganando medalla de oro con el boyacense Cristian López en la categoría BC4, dos preseas de plata con Julián Valencia de BC1 y con Carlos Mario Rojas de BC3, y una de bronce con Ángela Hernández de BC4.
En la Copa América de Colombia 2017 realizó su mejor actuación en la historia de esta justa ganando un total de cinco medallas, donde dos fueron de plata, con Euclides Grisales en la categoría individual BC4; y con Duban Cely, Tito García y Euclides Grisales en equipos BC4. Las otras tres de bronce, con Duban Cely en individual BC4; Jesús Romero, Ferney Rojas y Carolina García en la categoría equipos BC3. Y con Diego Solarte, Andrés Díaz, Gregorio López, Álvaro Gutierrez y Guillermo Salamanca en equipos BC1- BC2.
Posteriormente, en el World Open de Kansas 2017 se llevó una medalla de oro con Euclides Grisales y Duban Cely en la categoría parejas BC4, y una de bronce con Euclides Grisales en individual BC4, cerrando un año de éxitos para la delegación colombiana.
Para el 2018 también tuvo un año muy sobresaliente, ganando un total de seis medallas en competencias internacionales, donde dos fueron en el World Open de Montreal 2018, con plata y bronce; una de plata en el World Liverpool 2018, y tres en el Open Regional Buenos Aires 2018, dos de oro y una plata.
Finalmente en 2019 participó en el World Open de Montreal y obtuvo bronce en la categoría equipos BC4. Así mismo, hizo su mejor representación en los Juegos Parapanamericanos de Lima 2019, conquistando medalla de oro con Euclides, Leidy Chica y Duban Cely en equipos BC4; tres preseas de plata con Jesús Romero, Carlos Tinjacá y Carolina García en equipos BC3, con Jesús Romero en individual BC3, y con Euclides Grisales en individual BC4; y una de bronce con Duban Cely en individual BC4. Para la Copa América Sao Paulo 2019 sus atletas lograron dos preseas de plata, la categoría por equipos e individual BC4.
De esa forma, Ortega acumula en su medallero un total de 34 preseas, 6 son de oro, 17 de plata y 11 de bronce, catalogándose como el mejor entrenador de Boccia del país.
En cuanto a las compencias en Juegos Paralímpicos, estuvo muy cerca de clasificar a Londrés 2012 y a Río 2016, pero no pudo por poco. Sin embargo, lo logró para los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020, llevando a los atletas Duban Cely, Leidy Chica y Euclides Grisales, obteniendo un diploma paralímpico con este último; siendo la primera vez que la delegación colombiana de Boccia asistía a una edición en la historia de la máxima justa del deporte paralímpico.
No cabe duda de que con su llegada revolucionó al Boccia y su secreto se debe a la investigación y a ser más metódico en el proceso de evaluación y seguimiento. Él mismo diseñó una escala propia para evaluar la efectividad de los deportistas, así mismo, Ortega indicó que ‘‘hay un proceso y capacitación con las demás regiones, con el objetivo de que todos hablemos el mismo idioma, es decir, se compartió la visión y estrategia para que no solo una región sobresalga, sino todo el país’’.
Su filosofía como entrenador también ha sido fundamental para apoyar el proceso deportivo de los diversos atletas. ‘‘Me enfoco en el desempeño del atleta, en mejorarlo y tener un seguimiento para aumentar su rendimiento, no tanto en las medallas’’, manifestó. Así mismo, indicó el aprecio y el gran significado que tiene el deporte paralímpico para él, añadiendo que ‘‘ el deporte paralímpico representa una estrategia de rehabilitación e inclusión social’’.
Ahora, los objetivos de cara al futuro están enfocados en los Juegos Paralímpicos de París 2024, con el fin específico de clasificar más categorías y ganar al menos una medalla, por ello, desde ya trabaja para lograrlo. Por otro lado, Ortega incluyó que su mayo sueño es convertirse en el mejor entrenador de Boccia en el mundo, a través de su buena labor y gestión de procesos deportivos.
En sus ratos libres, le gusta viajar en con el propósito de experimentar otras culturas. Aunque Colombia ya ha hecho historia, de la mano de Camilo Ortega el deporte Paralímpico de Boccia seguirá creciendo.