En el Centro Ceremonial de Pueblos Originarios de la comuna de Peñalolén, en la ciudad de Santiago, a los pies de la cordillera de los Andes, se dieron a conocer en un evento simbólico las antorchas Panamericanas y Parapanamericanas para los Juegos de Santiago 2023, que recorrerán el país hasta llegar al pebetero del Estadio Nacional de Chile.
El relevo de la misma, iniciará el 13 de noviembre desde Santiago Norte y finalizará el 17 de noviembre en el Parque Estadio Nacional, con un total de 5 fechas y 23 comunas, donde se unificarán las llamas de las antorchas y se hará homenaje a la luna y el sol.
En la ceremonia participaron atletas, embajadores y autoridades, que presenciaron una rogativa mapuche, un ritual de la comunidad donde se agradece a las fuerzas de la naturaleza que permiten poder realizar el evento, reconocer lo obtenido y pedir por lo que falta, que busca principalmente atraer buena energía a las antorchas
Cada una de ellas cuenta con elementos representativos y tradicionales de la cultura chilena; inspiradas también en los tonos del territorio, contando con colores café, azul y celeste, en compañía de un fondo que representa el relieve cordillerano de norte a sur como si fuese un mapa.
Cuenta con una altura de 66 cm y un peso de 1,5 kg.
La antorcha Parapanamericana
Según la organización de Santiago 2023, la antorcha Parapanamericana y sus símbolos “Representan la Luna y su fuerza sobre la geografía de Chile como protagonista. La llama será encendida en la Cordillera de los Andes, iluminando la noche y abriendo su camino al Valle Central para compartir la fuerza del deporte Parapanamericano”
Encarna, además, a los más de 100 portadores de la antorcha que permanecerán cinco días atravesando Chile, con un recorrido de aproximadamente 1.000 kilómetros por la región y 23 comunas de la ciudad de Santiago.
Por otro lado, cuenta una textura metálica, un rojo cobrizo que alude a los colores del país y elementos en braille.
El origen de la antorcha
El relevo de antorchas hace alusión a un punto de encuentro generado por el deporte, que va más allá del transporte de esta por diferentes lugares del país. La historia mesoamericana percibe esto como el “símbolo de la creación, específicamente, el nacimiento del quinto Sol y Luna tras el sacrificio de dos dioses en Teotihuacán”, (Juegos Santiago 2023). Ambos astros surgen para brindar energía vital a la tierra.
Según las historias nativas, la luna es aquello que puede iluminar en medio de la oscuridad, afianzando su importancia en los relatos de personas de la cordillera que prenden el fuego para iluminar su camino hacia el valle central, lugar donde reposará la antorcha Parapanamericana
