#HistoriasCPC
María Teresa Restrepo nació en la ciudad de la eterna primavera, Medellín, el 13 de mayo de 1982. Su niñez la vivió estudiando, compartiendo en familia y jugando golosa, uno de sus pasatiempos que más le gustaban cuando era niña.
Ella sufrió en carne propia las consecuencias de la violencia que por años ha ocurrido en el país, una bala perdida fue la que provocó su lesión. Su diagnóstico es lesión medular por impacto de bala, y a pesar de que fue un arma precisamente la que generó esto, no le dio temor y decidió escoger este deporte y disparar un arma pero para llenar de triunfos su país en el ámbito deportivo.
Llegó en el 2012 al deporte paralímpico, “estaba en natación y quería un deporte para competencia, que me gustará, pero en natación no pude, así que Nancy, la entrenadora que tenía en ese momento, me habló de una disciplina llamada tiro”, comentó María Teresa. Y fue así como la curiosidad la llevó a disparar.
En diciembre de 2018 en el Abierto Internacional de Tiro Para deportivo en Cali, Restrepo logró su cupo a los Juegos Parapanamericanos de Lima, Perú en la competencia de rifle. En el polígono Bernardo Tobar demostró la fuerza que le ha dado ser la primera mujer de esta disciplina en el país. De esta manera llegó a los Lima 2019 y el 27 de agosto y alcanzó una medalla de bronce, la primera medalla en esta disciplina para Colombia. Respecto a esto María Teresa dijo: “gracias a Dios yo tuve la oportunidad de traerme la primera medalla, ahora para mí es un orgullo siendo la única mujer en este deporte”.
De esta manera ratificó el trabajo que lleva realizando hace ocho años y la experiencia que ha logrado en las competencias nacionales e internacionales en las que ha tenido la oportunidad de participar. “El triunfo que más me marcó conseguir esta medalla en los Juegos Parapanamericanos, el bronce fue algo súper importante y especial para mí”, comentó María Teresa, quien poco a poco cumple sus sueños en el deporte que tantas alegrías le ha dado.
Es una mujer que de cada presentación aprende, no solo de la competencia, sino que forma un vínculo con los jueces, las personas que la acompañan y sobretodo disfruta de compartir con los demás tiradores. El amor que pone en este deporte la motiva en sus presentaciones, sin dejar de lado a su familia, su grupo de compañeros y su entrenador, quienes siempre la apoyan.
Para despedirse María Teresa aprovecha la oportunidad para enviarle un mensaje a todos los seguidores del Comité Paralímpico Colombiano y a todas las personas a las que se les presentan obstáculos en la vida, “independientemente de lo que pase en la vida y por más duro que sea, ésta sigue. Sobre todo, hay cosas grandes y hermosas que ni sabemos que existen, ahí es donde vemos la vida de otra forma y nos damos cuenta de que somos muy importantes para otras personas”.
